Luego de varias décadas de iniciada la vacunación contra la hepatitis B, la pregunta surge: ¿es necesaria una dosis de refuerzo?

La protección a largo plazo se mide a través de cuatro métodos: la respuesta anamnésica después de la administración de una dosis de refuerzo, la tasa de infección en las poblaciones vacunadas, las pruebas in vitro de la actividad de las células B y T , y los estudios seroepidemiológicos.

Se ha demostrado que la protección está presente a pesar de una disminución de los anticuerpos de superficie anti-hepatitis B. El mecanismo exacto de la protección a largo plazo, sin embargo, aún no está completamente comprendido.

No hay necesidad de refuerzos en personas inmunológicamente sanas, siempre y cuando se haya administrado un esquema completo de vacunación y en los plazos recomendados, tal como lo demuestran los estudios realizados hasta 20 años después de esa inmunización. Sin embargo, para los pacientes inmunocomprometidos, debe ser evaluada una dosis de refuerzo basada en el monitoreo serológico.

Fuente: Clinical Infectious Diseases 2011;Vol 53(1):68 75

Contenido actualizado el January 5, 2021, 5:02 pm